EL CHOLLO DEL CLIENTELISMO

Ya sabéis lo poco que me gusta convertir este lugar,  cuya razón de ser era debatir tranquilamente sobre baloncesto y todo lo que lo rodea, en un medio para que alguien, en este caso yo, vuelque todas sus frustraciones.  A pesar de ello, una vez más, y a lo largo de los últimos meses se ha convertido casi en una norma,  voy a dejar el baloncesto a un lado para tratar otros temas que están alejadísimo de lo que ocurre en una cancha.

Aunque parezca una broma barata,  he podido leer en algún medio de comunicación la calificación de la campaña de captación de aficionados del club como «un chollo de abono»  y lo que me me ha venido a la cabeza  es otro tipo de chollo algo más oscuro,  el del clientelismo que se gastan algunos medios de la ciudad encabezados por «el de las alimañas».   De mis continuas entradas tratando estos temas (he tenido algún enganche con algún periodista por esto que voy a comentar) se deduce que yo nunca he logrado comprender como hay medios de comunicación que deciden inventarse nombres de fichajes en pos del clientelismo,  bien a instancias de su propia  imaginación para crear estados de euforia que beneficien al club o bien ejerciendo de voceros del club (la verdad es que me da igual).    Supongo que el valor de la rigurosidad que uno da a determinadas acciones no es el mismo que le da todo el mundo.   A pesar de esto,  bien es cierto que ese coste de rigurosidad y, si se me permite, de cierta profesionalidad es un sacrificio que muchos periodistas quieren afrontar por tener buena sintonía con el club y por alcanzar cierta notoriedad,  esa  «búsqueda de la primicia ficticia»  basada en acertar una de 30 y exprimirla hasta la extenuación,  para lograr el fin que no es otro que vender periódicos u obtener pinchazos en su noticia.   Esa frase que todos hemos escuchado en la que se dice algo así como» que la verdad no te estropee un gran titular».

Como digo, yo nunca estaré de acuerdo con esta forma de actuar, sin embargo,  es cierto que los periódicos son empresas y si pueden sacar un rédito mayor a corto plazo haciendo uso de este clientelismo que a largo plazo, siendo un periódico fiable… allá ellos.   .

Sin embargo, esta mañana he comprobado un caso absolutamente desolador.   Lo que podemos llamar el chollo del clientelismo (como el del abono para algunos medios) ,  consistente en el uso por parte del club de algún medio de comunicación sin prestación alguna (que conozcamos…claro está) para escribir una columna absolutamente increíble.  He intentado encontrar las palabras adecuadas para definir el artículo y la situación pero en ningún caso lo consigo hacer de una forma elegante así que prefiero obviar mi opinión.  Que cada cual saque sus conclusiones.

Por último, a modo de nota personal no he recibido respuesta al mail así que tras realizar las gestiones por medio del telefono, he decidido darme de baja de la competición europea por primera vez desde que soy abonado al club hace casi 20 años (y tengo 30) por la sencilla razón de que en el club debe darse cuenta de el camino que está llevando.  Si no prescindo de la ACB es porque esto del baloncesto es de las pocas cosas que me ilusionan a día de hoy y me niego que esta panda de incompetentes me quiten eso.

Un triste saludo.