A vueltas con nuestros pivots

Los últimos días no paro de ver como aumenta, y con razón, el reconocimiento mediático nuestros dos ‘cincos’. Se les llega a colocar como uno de los ejes principales sobre los que se asienta la mejora que ha experimentado el equipo desde el partido ante Murcia, cuando  daba sensaciones de estar muerto.

Creo que puede haber unanimidad sobre las características y la incidencia de nuestros pivots en el juego.  Si bien Fran si que tiene un talento mayor para la lectura del juego, sobre todo defensivamente,  ni él ni Cooley pueden ser considerados como pivot talentosos.  Más bien entran en el terreno de los hombres altos rocosos, dinámicos, físicos, reboteadores, intimidadores… que te permiten imponer un nivel de intensidad grande en el juego, que producen más desde el rebote ofensivo o aprovechando las ayudas de sus defensores, que por tener la capacidad de ser un referente ofensivo del equipo.  Situación que, dicho sea de paso,  tiene una relación muy buena con el baloncesto de Plaza, casi nunca se elabora desde las posiciones interiores.

Donde no hay unanimidad, al menos por mi parte, es en atribuir a la ausencia del mal rollo que podía provocar Hendrix el progreso de nuestros dos pivots.  Principalmente porque yo dudo de esa mejora en el caso de Cooley y no creo que haya tenido en la ausencia de Hendrix la principal causa en el caso de Fran.

Me explico.  Para mi Cooley ha jugado todos y cada uno de los minutos que ha tenido con Unicaja ofreciendo las mismas características y con la misma intensidad.  Dando igual si ha jugado 5 o 25 minutos, otra cosa es el uso que se ha hecho de él (aun recuerdo las rotaciones desastrosas del partido ante el Barça).  El caso de Fran es diferente.  Yo si que creo que lleva una línea ascendente en su rendimiento muy lenta pero constante desde hace unos meses, quizás encubierta por el desastroso nivel de baloncesto que el equipo ha desarrollado (que en un jugador que depende tanto del equipo como Fran es imprescindible).

Teniendo esto en cuenta…¿qué ha ocurrido entonces?  pues para mi la clave ha sido que el entorno ha jugado a favor de Plaza obligándole a recortar la rotación (que es la verdadera clave de esta mejora).  Él es absolutamente incapaz de tomar decisiones drásticas (siempre pongo el ejemplo de Casimiro cuando se cargó a Valters para poner a Alberto, a diferencia de lo que ha pasado este año con varios jugadores muy criticados sobre los que la unica decisión que se ha tomado es que pase el tiempo, Jackson es otro…) pero es un hombre con tendencia a encontrarse situaciones ventajosas sin buscarlas (siempre pongo el ejemplo del trabajo de Boza con Dragic que era un jugador que él no quería y del que luego se ha apuntado un tanto en su desarrollo que no le corresponde) y a eso nos podemos agarrar.

Esta reducción de la rotación se soporta en la ‘suerte’ de que apareciera un Maccabi salvador para llevarse a un jugador como Hendrix (que si bien era  bastante criticado de cara a la prensa, con filtraciones de todo tipo, nunca se tomó ninguna decisión sobre él cuando estaba en el equipo) y la ‘suerte’ de que el club no encontrara otro ‘5’ como quería Plaza para aumentar la rotación, situación que parece que el club, con muy buen criterio (aunque a Plaza no le guste), ha desechado.

En definitiva, me hubiera gustado disponer de un entrenador capaz de tomar decisiones para mejorar el equipo y no uno al que el hecho de que sus decisiones no se hayan llevado a cabo nos ha beneficiado.